Dejo Cancún, con Emily y sus vientos huracanados, con sus compras de pánico y sus nubes de mosquitos, me alejo del paraíso que en algún momento elegí, me voy sin saber decirle adiós a Pagola, a Sol, a Eric, al tocasho y colega uruguasho... y es que otros aires me reclaman, el alma inquieta no cesa y pide un cambio... la madurez parece que quiere entrar de lleno y es harto difícil saber qué hacer en estos momentos.
Así que decido decirle adiós a las aguas color turquesa, a Nichupté, a playa y a Luna, de la que tampoco me pude despedir, dejo atrás a un puñado de amigos medio consternados por la desaparición, sin siquiera esperar que puedan aclarar alguna duda con éstas letras, tan sólo que sepan que ya no estoy... que he DESAPARECIDO.
Me llaman el desaparecido
Que cuando llega ya se ha ido
Volando vengo, volando voy
Deprisa deprisa a rumbo perdido
Cuando me buscan nunca estoy
Cuando me encuentran yo no soy
El que está enfrente porque ya
Me fui corriendo más allá
Me dicen el desaparecido
Fantasma que nunca está
Me dicen el desagradecido
Pero esa no es la verdad
Yo llevo en el cuerpo un dolor
Que no me deja respirar
Llevo en el cuerpo una condena
Que siempre me echa a caminar
Me llaman el desaparecido
Que cuando llega ya se ha ido
Volando vengo, volando voy
Deprisa deprisa a rumbo perdido
Yo llevo en el cuerpo un motor
Que nunca deja de rolar
Yo llevo en el alma un camino
Destinado a nunca llegar
Me llaman el desaparecido
Cuando llega ya se ha ido
Volando vengo, volando voy
Deprisa deprisa a rumbo perdido
*Manu Chao
Y así, desaparezco, sólo por un momento, sólo por un instante, ruego que no me busquen...
...de todos modos si no quiero no me encontrarán.
El llanero solterón en vuelo fugaz.
In Lakech
No hay comentarios.:
Publicar un comentario