jueves, 5 de mayo de 2005

Sonata sin número




Traigo el corazón a cuestas
el alma encendida y las piernas dispuestas

Todos los 365 ojos del cuerpo se han abierto
uno por cada día del año
aunque pueda sonar tan serio

Cuando me has encontrado más allá de la resignación
con las ganas a flor de piel
tus besos ahora insolubles ya no tienen razón

Ellos suben, ellas decidieron esperar
como si por inercia pudieran saber
que unos han de bajar
que las otras siempre esperarán

Traigo el corazón a cuestas
justo donde las alas se juntan
con la sonrisa que provoca...

Hoy te saldré a encontrar

por que hoy, me he hartado ya de tanta búsqueda.



el llanero solterón sobrio de empecinamientos
In Lakech

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